Las plazas públicas corresponden a espacios urbanos, que permiten a la sociedad en general la realización de una gran variedad de eventos; en ellas se concentran actividades sociales, comerciales, culturales e ideológicas. Sin embargo, la aglomeración y concurrencia de estos espacios, también da lugar a la presencia de un contaminante silencioso “el ruido”. Un ejemplo de ello es la zona del Centro de Coyoacán, en donde alrededor de la Plaza Hidalgo y del Jardín Centenario, existen varios establecimientos mercantiles con giros de venta de comida y bebidas, que contribuyen a generar niveles sonoros elevados.

La Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT), en el año 2011, realizó una evaluación de los niveles sonoros existentes en 24 puntos ubicados en el Centro de Coyoacán.

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