En la Ciudad de México (CDMX), la contaminación acústica constituye junto con la contaminación del aire un problema ambiental que afecta a sus habitantes, prácticamente no existen estudios específicos que permitan dimensionar el impacto del ruido en el ambiente, pero es evidente que las fuentes móviles como vehículos de transporte de carga, autobuses y automóviles son la causa principal del ruido citadino. El ruido generado por los vehículos de transporte de pasajeros genera campos acústicos de gran impacto urbano debido a las numerosas unidades que circulan por las vías primarias y parte de las vías secundarias de la Ciudad.

Otra fuente frecuente de ruido en la CDMX es el ocasionado por obras públicas que pueden generar campos acústicos de gran impacto vecinal, ya que el ruido es emitido por la maquinaria de construcción en funcionamiento y los vehículos de transporte de carga en movimiento; algunas máquinas como hincadoras de pilotes y martillos neumáticos, generan elevados niveles de presión acústica acompañados de vibraciones mecánicas que afectan las áreas aledañas a las obras.

Durante el 2016 y 2017, se evaluaron los niveles sonoros en diferentes puntos dentro de la Ciudad de México por donde pasará el Tren Interurbano Toluca- Valle de México, en condiciones previas a la obra y durante la obra.

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